Varias edificaciones construidas en Quito a mediados del siglo XX, por los años 50 y 60, se alistan para ingresar a la lista de bienes patrimoniales de la capital ecuatoriana y así garantizar su conservación.El Instituto Metropolitano de Patrimonio, IMP, continúa levantando el catálogo de bienes a ser preservados a través de su inclusión en el inventario general del patrimonio edificado de la capital.
Para la incorporación de las nuevas “joyas arquitectónicas” en estos días el Municipio de Quito a través del Instituto de Patrimonio firmará un contrato con la Facultad de Arquitectura de la Universidad Central, mediante el cual seis profesores y unos 60 estudiantes de esa rama realizarán este trabajo.
Se pretende registrar unos 1.212 inmuebles de características patrimoniales principalmente de aquellos que se encuentran fuera del núcleo central de la capital.
En esta nómina ingresarán decenas de casas de los barrios América, Belisario Quevedo, La Mariscal y otras del sector de Guápulo. El nuevo inventario también tomará en cuenta, en esta ocasión, al barrio La Floresta, donde anteriormente no se practicó este registro.
Según la unidad de inventario patrimonial del IMP, en el próximo levantamiento se realizará una actualización del inventario realizado en 1990 y se incorporará inmuebles que forman parte de la arquitectura del siglo XX y que anteriormente no integraban la lista patrimonial.
En este caso están edificios como el Hotel Quito (cuya construcción data de 1956-1960); el edificio del IESS del sector El Ejido (edificado en 1957-60); el Estadio Olímpico Atahualpa (1948-51), el Palacio Legislativo (1956-60) y la Ciudadela Universitaria (1945-50) que está conformada con varios edificios representativos como el Teatro Universitario, la Administración Central, Facultad de Jurisprudencia, Residencia Universitaria, el estadio universitario. A estos se sumarán otros que fueron diseñados por los arquitectos uruguayos Gilberto Gatto Sobral y Guillermo Jones Odriozola, este último, autor del primer Plan Regulador de Quito.
El estadio Olímpico Atahualpa (1948-51) un hito representativo del deporte ecuatoriano, es además un edificio que presenta en su construcción elementos tecnológicos nuevos, como la visera que cubre la tribuna y ha sido resuelta con estructura de hormigón armado conformando bóvedas cáscaras en volado: un alarde tecnológico para su tiempo.
En el caso del edificio del Hotel Quito (1956-60) lo que más llama la atención es su acceso en forma de “paraboloide hiperbólico”, igualmente tipo “cascara” cuyo diseño estructural fue realizado por el Ing. Andrés Segovia. Se trata de uno de los primeros ejemplos de este tipo levantadas en el país.
Y así, serán identificadas e incluidas como bienes patrimoniales otras edificaciones que datan de mediados del siglo XX en adelante de autoría de conocidos arquitectos y diseñadores como: Milton Barragán, Mario Arias, Luis Oleas, Sixto Durán Ballén, Diego y Fausto Banderas, Ovidio Wappenstein, Rafael Vélez Calisto, entre otros.
Una vez inventariados estos lugares deben conservar los detalles originales, sobre todo, en sus aspectos constructivos y estructurales. Otro detalle importante es que deben ser sometidos continuamente a labores de mantenimiento y sus reparaciones realizadas priorizando los mismos materiales constructivos.
Asimismo en el nuevo inventario se prevé la incorporación de alrededor de 320 casas de hacienda existentes en el distrito; equipamiento urbano como espacios públicos (parques, plazas, avenidas, calles), así como unos 60 cementerios urbanos y rurales.
Inventario religioso
Paralelamente, el Instituto Metropolitano de Patrimonio lleva a cabo un tercer inventario de la totalidad de la arquitectura religiosa de unas 190 iglesias. En este caso los datos que se logren determinarán el estado de los templos y los planes para cada uno de ellos.
Finalmente, todos y cada uno de los registros que arrojen estos inventarios ingresarán a un programa informático que servirá para canalizar varias acciones previstas por la municipalidad a través del Instituto Metropolitano de Patrimonio.
Para la incorporación de las nuevas “joyas arquitectónicas” en estos días el Municipio de Quito a través del Instituto de Patrimonio firmará un contrato con la Facultad de Arquitectura de la Universidad Central, mediante el cual seis profesores y unos 60 estudiantes de esa rama realizarán este trabajo.
Se pretende registrar unos 1.212 inmuebles de características patrimoniales principalmente de aquellos que se encuentran fuera del núcleo central de la capital.
En esta nómina ingresarán decenas de casas de los barrios América, Belisario Quevedo, La Mariscal y otras del sector de Guápulo. El nuevo inventario también tomará en cuenta, en esta ocasión, al barrio La Floresta, donde anteriormente no se practicó este registro.
Según la unidad de inventario patrimonial del IMP, en el próximo levantamiento se realizará una actualización del inventario realizado en 1990 y se incorporará inmuebles que forman parte de la arquitectura del siglo XX y que anteriormente no integraban la lista patrimonial.
En este caso están edificios como el Hotel Quito (cuya construcción data de 1956-1960); el edificio del IESS del sector El Ejido (edificado en 1957-60); el Estadio Olímpico Atahualpa (1948-51), el Palacio Legislativo (1956-60) y la Ciudadela Universitaria (1945-50) que está conformada con varios edificios representativos como el Teatro Universitario, la Administración Central, Facultad de Jurisprudencia, Residencia Universitaria, el estadio universitario. A estos se sumarán otros que fueron diseñados por los arquitectos uruguayos Gilberto Gatto Sobral y Guillermo Jones Odriozola, este último, autor del primer Plan Regulador de Quito.
El estadio Olímpico Atahualpa (1948-51) un hito representativo del deporte ecuatoriano, es además un edificio que presenta en su construcción elementos tecnológicos nuevos, como la visera que cubre la tribuna y ha sido resuelta con estructura de hormigón armado conformando bóvedas cáscaras en volado: un alarde tecnológico para su tiempo.
En el caso del edificio del Hotel Quito (1956-60) lo que más llama la atención es su acceso en forma de “paraboloide hiperbólico”, igualmente tipo “cascara” cuyo diseño estructural fue realizado por el Ing. Andrés Segovia. Se trata de uno de los primeros ejemplos de este tipo levantadas en el país.
Y así, serán identificadas e incluidas como bienes patrimoniales otras edificaciones que datan de mediados del siglo XX en adelante de autoría de conocidos arquitectos y diseñadores como: Milton Barragán, Mario Arias, Luis Oleas, Sixto Durán Ballén, Diego y Fausto Banderas, Ovidio Wappenstein, Rafael Vélez Calisto, entre otros.
Una vez inventariados estos lugares deben conservar los detalles originales, sobre todo, en sus aspectos constructivos y estructurales. Otro detalle importante es que deben ser sometidos continuamente a labores de mantenimiento y sus reparaciones realizadas priorizando los mismos materiales constructivos.
Asimismo en el nuevo inventario se prevé la incorporación de alrededor de 320 casas de hacienda existentes en el distrito; equipamiento urbano como espacios públicos (parques, plazas, avenidas, calles), así como unos 60 cementerios urbanos y rurales.
Inventario religioso
Paralelamente, el Instituto Metropolitano de Patrimonio lleva a cabo un tercer inventario de la totalidad de la arquitectura religiosa de unas 190 iglesias. En este caso los datos que se logren determinarán el estado de los templos y los planes para cada uno de ellos.
Finalmente, todos y cada uno de los registros que arrojen estos inventarios ingresarán a un programa informático que servirá para canalizar varias acciones previstas por la municipalidad a través del Instituto Metropolitano de Patrimonio.
Para mas informacion de la Carita de Dios www.visitecuador.com.ec
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